Demi Gerovasilis
Asunción Arnedo
SPAN231-02
5 de marzo 2021
Los aspectos significativos de la cultura, alimentos, y hábitos alimenticios que he aprendido de la dieta mediterránea incluyen la alimentación de la grasa saludable, como el aceite de oliva, el pescado, y el vino, y también el valor de la actividad física diaria. Se explica que la actual “trilogía mediterránea” consiste de pan, aceite y vino (Fundación Alícia). En particular, Josep Pla dijo que, “El aceite de oliva ha sido, desde siempre, la grasa del hombre mediterráneo” (267). Por lo tanto se entiende que el aceite de oliva es una grasa muy respetado en la dieta mediterránea, y este alimento se puede añadir a una variedad de platos. Específicamente, el aceite de oliva se utiliza para amenizar los guisos de pescado, que se come mucho en la dieta mediterránea (Pla 267). Con relación al pescado, este alimento deben ser comidos en abundancia porque la grasa del pescado tiene propiedades protectoras frente enfermedades cardiovasculares (Fundación Dieta Mediterránea). De hecho, la dieta mediterránea se considera una dieta cardiosaludable por el alto contenido en grasas monoinsaturadas (Fundación Alícia).
Principalmente, el aceite de oliva, los pescados, el vino, y los los frutos secos, como los nogales, los avellanos, y las castañas, son grasas monoinsaturadas que proporcionan muchos beneficios. Por ejemplo, estas grasas mejoran el metabolismo de la glucosa, aumentan la oxidación de grasas e inducen el proceso de la termogénesis (Fundación Alícia). También, el consumo moderado de vino aporta cantidades óptimas de resveratrol, que reduce el tamaño de las células grasas (Fundación Alícia). Por consiguiente, estos alimentos ayudan en la prevención de diversas enfermedades, como la obesidad, las enfermedades cardiovasculares, el síndrome metabólico, el cáncer, y hasta el Alzheimer (Fundación Alícia).
Lo más importante a reconocer con respecto a a dieta mediterránea es la práctica de actividad física diaria. Un estilo de vida activo y saludable conserva una buen salud y proporciona equilibrio entre la alimentación y el ejercicio. Además, las actividades de intensidad moderada ayudan al control de peso por el aumento de las necesidades energéticas (Fundación Alícia). En general, la actividad física diaria permite vivir una vida larga y saludable.
En la dieta mediterránea, un aspecto significativo de los hábitos alimenticios es el uso de los productos frescos y de los ingredientes de proximidad y de temporada. El límite de los alimentos procesados, los fritos y los rebozados con esta dieta, reduce la incorporación de grasas saturadas innecesarias en los platos que se come. Por esta razón, en la dieta mediterránea, se utiliza cocciones como el hervido, al horno, o a la plancha principalmente (Fundación Alícia).
En definitiva, la dieta mediterránea ofrece una forma cultural y sostenible de comer muchos alimentos diferentes y adoptar un estilo de vida saludable. Una pregunta personal para mis compañeros de clase es, ¿Que alimento de la dieta mediterránea es tu favorito?
Nuevo léxico:
amenizar – to liven up
el guiso – stew
el nogal – walnut
el avellano – hazelnut
el castaña – chestnut
la termogénesis – thermogenesis
https://www.eatthis.com/mediterranean-diet-foods/
Obras citadas:
Fundación Alicía y Laboratorios Thea. “La dieta mediterránea: Un estilo de vida actual.” Alicía, https://www.alicia.cat/uploads/document/Monografia%203.pdf
Pla, Josep. Lo Que Hemos Comido. Destino, 2013.
“¿Qué es la dieta mediterránea?” Fundación Dieta Mediterránea, dietamediterranea.com/nutricion-saludable-ejercicio-fisico/#piramide. https://dietamediterranea.com/nutricion-saludable-ejercicio-fisico/#piramide